dijous, 19 de febrer del 2009

Avaluació de la Política d'Exteriors i de Seguretat Comuna (PESC)


Ahir vam debatre al ple del Parlament l'informe anual sobre l'avaluació de la PESC corresponent a 2007 i avui l'hem votat. El ponent del text és el president de la Comissió d'Afers Exteriors, Jacek Saryusz-Wolski (PPE) i jo he exercit de ponent a l'ombra del grup socialista. Aquesta és la meva intervenció en el debat:

"Estimados colegas, señora Ferrero-Waldner, señor Solana, quisiera, en primer lugar, dar las gracias a los tres ponentes por su trabajo y, en tanto que ponente alternativo del informe sobre la PESC, me referiré a este informe en concreto, empezando por felicitar al señor Saryusz-Wolski por el resultado de su trabajo y por la colaboración que ha ofrecido a los demás grupos para conseguir un resultado consensuado.

De la misma manera que este Parlamento ha reclamado en numerosas ocasiones que la Unión Europea se dote de los instrumentos necesarios para hablar con una sola voz en el mundo, también la propia Cámara sabe mostrarse cohesionada en torno a la evaluación y el impulso de las grandes prioridades en política exterior y de seguridad común.

El empeño de nuestro grupo —el Grupo Socialista— ha ido en una doble dirección: por un lado, introducir o reforzar grandes cuestiones que para nosotros son clave, de manera transversal a toda la política exterior, tales como la lucha contra el cambio climático, el fomento de la paz en todo el planeta o una apuesta por el desarrollo humano; por otro lado, proponer elementos de reequilibrio entre las prioridades geográficas de la PESC respecto a como aparecían originalmente en el texto, si es que aparecían, o introducirlas como elemento nuevo, si estaban ausentes.

De esta manera hemos abogado, por ejemplo, por una mayor clarificación de las acciones entre los marcos institucionales y de cooperación implicados en la dimensión oriental, definida recientemente. Hemos defendido una mayor diversificación y una mayor relevancia de las relaciones con África, un continente del que a menudo sólo nos acordamos cuando se producen guerras de especial virulencia, y muchas veces ni siquiera así.

Con relación a América Latina, hemos querido que queden reflejados los actuales procesos de negociación de acuerdos de asociación, los primeros de naturaleza birregional que concluirá la Unión Europea en toda su historia.

En cuanto al Mediterráneo, nos hemos opuesto a una aproximación reduccionista que sólo hable de seguridad, para incluir, en cambio, todo el rico acervo político, económico y sociocultural contenido en el Proceso de Barcelona.

En cuanto a las enmiendas para el Pleno, nuestro grupo no ha presentado ninguna, creyendo que, de alguna manera, se refuerza así el equilibrio logrado con los compromisos y, por lo tanto, nos vamos a oponer a la mayoría de las enmiendas para no debilitar el compromiso alcanzado en la Comisión de Asuntos Exteriores."

dilluns, 16 de febrer del 2009

Geòrgia

Durant dos dies té lloc a Brussel.les la reunió semestral de la Comité de Cooperació Parlamentària Unió Europea-Geòrgia. La guerra entre Rússia i Geòrgia del passat mes d'agost encara és recent i un no pot deixar de tenir la impressió que fer referència a temes que no estiguin directament relacionats amb els fets dramàtic pot resultar fora de lloc. Malgrat tot, cal fer un esforç de "normalització" i gosar preguntar la nostra contrapart per temes socials i econòmics de la vida del país. Avancen a bon ritme les reformes democràtiques i dels sectors productius? Se'ns diu que el president Shakasvili prepara una "segona onada democratitzadora". Com es veuen els plans de cooperació regional de propsa la UE? Els georgians afirmen que veuen amb molt bons ulls el Partenariat Oriental que la Comissió Europea ha definit fa pocs mesos. Ara bé: si s'hi inclogués Russia -com molts defensem-, això sería un problema i un obstacle per a Geòrgia, ens diuen.

Sorgeix una gran interrogant únanimement en la part europea: com és possible un esquema de cooperació i estabilitat a la regió del Caucas del Sud i de la Mar Negra sense Rússia. La resistència dels georgians no deixa de ser comprensible ara per ara, però no hi ha cap alternativa que se sostingui.

Faig una observació en aquest sentit i tot seguit hi sumo dos altres elements de d'abast més general. Per una banda, m'interesso per les polítiques d'igualtat de gènere, no tant per que en el país hi hagi més motius de preocupació que en d'altres, sinó per que al Parlament Europeu ens hem proposat d'incorporar aquesta pregunta -o, en un sentit més ampli, aquesta preocupació- de manera sistemàtica en tots els contactes amb delegacions extrangeres (fa alguns mesos vaig assumir aquesta responsabilitat a la Delegació del Caucas del Sud). Per altra banda, pregunto també per les polítiques educatives, com a la millor inversió que pot fer una societat amb divisions i enfrontament per per a poder soldar-se en el futur entorn a uns valors i una visió comuns.

Les respostes no m'han arribat, ni durant la resta del debat ni durant el sopar posterior. La voràgine de la guerra també ha engolit les idees reposades i ha desdibuixat el camí normal del progrés de tota una societat. El tamada, la persona a qui toca fer el llarg discurs de brindis que marca la tradició georgiana, parla d'optimisme però no ens estalvia la sensació que la petja de la guerra és i serà encara molt profunda.

dilluns, 2 de febrer del 2009

La situació del tèxtil a Europa

Durant la sessió plenària del Parlament a Estrasburg avui ha tingut lloc un debat sobre la Producció i la ocupació en el sector tèxtil i de la confecció en diversos Estats membres. L'origen és una pregunta de la Comissió de Comerç Internacional adreçada a la Comissió Europea. Heus aquí la transcripció i el video de la meva intervenció:

"Señora Presidenta, señora Comisaria, como vemos en los últimos tiempos, el sector textil está sufriendo una importante crisis que ha acarreado numerosos cierres de empresas, deslocalizaciones y desempleo; hechos que se concentran precisamente en regiones especializadas en esta actividad. Ante esta situación actual de coyuntura económica de crisis, la Comisión Europea debería actuar de manera rápida al lado de los Estados miembros para paliar los efectos socioeconómicos de esta reestructuración, especialmente dramática para los territorios y las familias afectadas. ç

Pienso que es necesario prestar ayuda a los trabajadores y trabajadoras del sector textil y de la confección con medidas sociales, con planes para las empresas que son objeto de restructuración y que se encuentran en estos momentos en serios apuros. Sería deseable destinar una parte sustancial del Fondo de Adaptación a la Globalización a la reestructuración y recalificación del sector textil y, en particular, a las pequeñas y medianas empresas, que componen mayoritariamente el sector en la Unión Europea y que sufren en mayor medida los efectos de la liberalización del mercado.

Por otro lado, es necesario restablecer el sistema de control de las importaciones procedentes del exterior y, especialmente por su volumen, de China. No se trata en absoluto de promover barreras comerciales. Se trata de compensar los efectos negativos de tal importante transformación, y es que tampoco debemos olvidar que la Unión Europea es el segundo exportador mundial de productos textiles y de prendas de vestir, lo cual hace necesario garantizar las mejores condiciones de acceso a los mercados de terceros países esenciales para el futuro de la industria textil y de la confección con sede en la Unión Europea y, en especial, para las PYME.

Todo esto, por supuesto, garantizando siempre una competencia leal sobre la base de la promoción de normas medioambientales y sociales en estos países. En este sentido, la publicación de la correcta información al consumidor, por ejemplo con el Reglamento sobre la indicación «made in» , que, por lo que sabemos, no se ha implementado, sería de gran utilidad, ya que, entre otras cosas, implicaría someter a los productos importados a los mismos requisitos en materia de seguridad y protección de los consumidores que aquellos fabricados en el interior de la Unión Europea."